El gobierno liderado por Vladimir Putin está considerando la introducción de un registro obligatorio de equipos mineros como parte de sus esfuerzos para aumentar el control sobre las operaciones de minería de Bitcoin (BTC) ilegales. Esta estrategia, similar a la implementada en Paraguay, buscaría combatir las actividades mineras no autorizadas que afectan a la economía y la seguridad del país.

El endurecimiento de las regulaciones en Rusia refleja un enfoque más restrictivo hacia la industria de criptomonedas, alineándose con otros países que han tomado medidas similares para proteger sus recursos energéticos y financieros.